sábado, 10 de mayo de 2014

Espero que no te hayas acostumbrado a mí;
estoy en tránsito, hacia un lugar
en el que nada cambia. Tiene nombre de número.
Puede que acudas ahí a buscarme,
no lo descarto,
encontrarás promesas frustradas, sueños viejos,
lluvia ácida, nuestro diálogo -el incesante-.
No creo que logres atraparme
aunque tal me avistes. Te reiré una broma antigua,
me verás ceder una lágrima por lo que ya no me aflije.
Habré perdido mi esencia,
no podré, a pesar de quien aún soy,
prestarte más tiempo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario